(Desde Leverkusen, Alemania) Exequiel Palacios camina lento por los pasillos del Bay Arena acompañado de sus muletas tras la lesión que lo dejó afuera de la competencia hasta el 2026, justo en la antesala del Mundial. El mediocampista argentino, que es uno de los habituales de Lionel Scaloni en cada convocatoria, reconoce con tono apesadumbrado que está ante el problema “más fuerte” que le tocó enfrentar en su carrera profesional.
La lesión muscular y tendinosa en el aductor derecho lo obligó a pasar por el quirófano hace un mes con un parte médico que anunció que estará ausente “hasta el inicio del próximo año”. Lentamente, el tono de dolor que expresa en la reducida rueda de prensa exclusiva para un puñado de medios hispanos organizada por la Bundesliga se transforma en esperanza e ilusión cuando enfoca su mirada en el futuro: Bayer Leverkusen sueña con pelear en Champions y la Copa del Mundo 2026 aparece también su horizonte, al mismo tiempo que él acaba de extender su contrato hasta 2030 en un gesto de respaldo del club alemán que lo fichó hace cinco años. En ese interín, tampoco se privó de opinar sobre el presente de los colores que lo apasionan: River Plate.
— ¿Cómo estás físicamente? ¿Hasta cuándo no te veremos en la cancha?
— Estoy ya un poco mejor de lo que es la parte anímica, porque fue un golpe muy duro para mí, para mi carrera, porque es una de las lesiones más fuertes que me ha tocado desde que llevo jugando al fútbol. Lo estoy afrontando de la mejor manera con mi familia, con amigos. El club desde el primer momento me acogió de la mejor manera. Me dio todas las posibilidades para poder recuperarme de la mejor manera. Soy consciente de que esto es un parate que me hace más fuerte para mi carrera, para poder seguir estando a la altura y estoy haciendo todos los requisitos para poder volver. Pero bueno, paso a paso, poco a poco. A veces la ansiedad a uno lo lleva más adelante porque, bueno, mirás los partidos y querés ya estar ahí. Pero como siempre digo, las cosas pasan por algo. Estoy preparado para volver mejor.
— ¿Con la Selección tuviste diálogo? ¿Te llamó Scaloni? Venías teniendo muchísimo espacio en el proceso y sos una pieza clave para el entrenador
— Sí, bueno, Leo me escribió, me mandó un mensaje que lo que necesite que está a disposición. La verdad que el cuerpo técnico, también mis compañeros de la Selección y acá (Bayer Leverkusen) se comunicaron conmigo, me dieron ese aliento, ese apoyo y la verdad que estoy eternamente agradecido porque puedo contar con ellos.
— ¿Qué consejos le estás dando al Diablito, a Equi, mismo a Sarco? ¿Cómo es el proceso de acompañarlos en el día a día?
— Yo cuando llegué acá estaba Lucas Alario y él me ayudó. Me aconsejó lo que era la ciudad, después dónde podía hacer el día a día para comprar en la casa. De mi humilde y poca experiencia, que ya llevo cinco años acá, en lo que los pueda ayudar, ya se los dije, pueden contar conmigo en lo que sea del día a día. De hecho, el otro día nos juntamos en casa, que fue mi cumpleaños, los invité. A mí me gusta compartir momentos con mi familia y que ellos también puedan venir. Saben que de mi lado, en lo que los pueda ayudar en el día a día, después en lo que es acá en el club, van a estar bien.
— ¿Y la competencia en tu puesto para el Mundial en la selección argentina cómo la ves? Porque Argentina está sacando buenos jugadores en el mediocampo e imagino que es una linda competencia interna
— La vara está muy alta, y más en el mediocampo porque hay jugadores de muy buena jerarquía. Enzo (Fernández), Mac Allister, Rodrigo (De Paul), Leandro (Paredes)… Pero el técnico siempre lo remarcó que para estar en la Selección hay que hacer las cosas bien en el club y es a lo que yo apunto. Primero hacer una buena recuperación, estar en foco acá en el club, ganar la mayor cantidad de minutos y ritmo posible para poder estar considerado y ganarme un lugar, obviamente, para estar en el Mundial.
— ¿Cómo ves a Leo Messi llegando a este posible sexto Mundial? Con un rol, imagino, distinto
— Increíble, ¿no? Todo lo que día a día nos sigue sorprendiendo. Como digo, la verdad que soy un privilegiado de poder compartir equipo, entrenamientos, cenas, charlas, cualquier cosa, lo que sea, en la Selección. Es lo que uno como jugador siempre quiere: estar con el mejor del mundo. Y lo va a seguir siendo mientras siga jugando a la pelota. Para mí va a ser el mejor del mundo. Se lo ve bien, se lo ve con ganas. Se ve reflejado que jugó el fin de semana y después no quiso perderse el partido del martes. Somos unos privilegiados. Aprovechar hasta el final que él esté con nosotros en la Selección.
— Estamos a ocho meses del Mundial, ¿cómo ves a la selección argentina? Y desde el punto de vista de Brasil, ¿cómo ves a este Brasil intentando rehacerse con Ancelotti?
— Siempre soy un privilegiado de poder estar en la Selección, que en cada convocatoria esté ahí presente, porque Argentina continuamente sigue sacando jugadores y la vara está muy alta. Hay muchos jugadores que lo están haciendo de la mejor manera. Y estar ahí entre esos 24 o 23 jugadores, para mí es un orgullo, siempre lo dije. Y de Brasil sabemos todos la calidad que tiene, los jugadores que tiene y la jerarquía. Siempre hay que respetarlos. Cuando son los torneos internacionales, aparecen y son muy fuertes.
— ¿Cuando Brasil fichó a Ancelotti, ustedes en la Selección hablaron, comentaron sobre el tema?
— No, no… A nosotros siempre el entrenador y los que están ahí nos hacen saber que tenemos que pensar solamente en Argentina y dar lo mejor para la Selección.
— ¿Qué podés decir de la rivalidad que se ha creado entre la selección mexicana y la selección argentina recientemente?
— No, creo que es más de la prensa. Si bien en los mundiales ya siempre nos ha tocado jugar con México y se hacen esos buenos partidos, en el buen sentido, pero mi punto de vista es más de la prensa la que habla, de los conflictos que quieren armar, porque siempre, en mi punto de vista, dentro de la cancha se han armado muy buenos partidos.
— ¿Cómo estás viendo ahora a River a la distancia en el rol de hincha? ¿Cómo estás viviendo todo este momento?
— Y bueno, sí: del mundo River siempre se habla a nivel mundial y de Sudamérica, pero como hincha siempre quiero que le vaya bien. De Marcelo (Gallardo) no puedo opinar nada. Siempre darles las gracias porque siempre confió en mí y la confianza que uno le tiene. No veo que esté River mal, sino que sólo es una racha de no poder ganar unos partidos, pero a River a dónde va, se lo respeta y no tengo duda de que la situación va a cambiar. Desde mi lado hincha siempre quiero lo mejor para River.
— Se han marchado unos 15 jugadores del Bayer Leverkusen y llegaron otros 15, ¿quién te ha sorprendido?
— La verdad que yo entre que me fui, después volví con la Selección, no pude compartir tanto porque después fue la lesión, pero al Diablito Echeverri lo tengo visto de la juvenil, en la Selección, de River. Es un jugador que me gusta el potencial que tiene. Creo que al Leverkusen le va a dar muchas alegrías. Con el tiempo lo veremos. Claudio es uno que me sigue impresionando.
— ¿Sentís que con la salida de muchos jugadores que al final del día fueron clave en el invicto de Leverkusen hoy sos uno de los estandartes y de los que más responsabilidad tienen? ¿Te lo hacen sentir así los compañeros nuevos? Por ejemplo, el Diablito ahora que acaba de llegar y que quizás podría ver en vos un ejemplo.
— Sí, bueno, soy consciente de que se han ido jugadores importantes para el club, que han logrado cosas muy importantes acá. Pero bueno, el fútbol es así, va cambiando continuamente. Se ha ido un entrenador, jugadores importantes, pero como digo ha quedado una base también muy importante que son de jugadores con jerarquía y han venido jugadores jóvenes que tienen mucho talento, mucho futuro. Pero bueno, es parte también de la adaptación. El tiempo nos va a llevar a un buen momento, en un buen camino de ir armando el equipo. También estoy un poco frustrado por estar en este lugar donde estoy y no poder ayudar ahí a mis compañeros.
— ¿Cómo miras los partidos ahora estando desde afuera? ¿Cómo ves a tu equipo?
— Siempre con ganas de estar ahí dentro del campo ayudando a mis compañeros. Pero sabemos que la temporada no ha comenzado como nosotros queríamos. Se han ido jugadores importantes, pero no es una excusa. Han quedado jugadores muy fuertes, con experiencia y también han llegado jóvenes con mucha calidad, con mucho futuro. Creo que de la mano de todos vamos a estar tirando para adelante. Yo desde mi lado, de mi poca experiencia que pueda aportar, voy a dar lo mejor para el club.
— Siendo un vestuario tan latino, ¿ayuda a la hora de la recuperación de la lesión?
— Sí, sí. El año pasado en el staff y muchos compañeros eran muchos españoles. Ahora han llegado también tres compañeros argentinos, después están los españoles, brasileros. Creo que de por sí el club se hace latino y a la gente eso le gusta. Les gusta creo que aprender también un poco español y eso se hace una buena armonía.
— Se habló mucho de cómo le iba a ir a Leverkusen luego de todas las bajas que tuvieron, luego encima una salida muy temprana de Ten Hag, pero ahora parece que el equipo se ve bien, van quintos en la Bundesliga y supongo que los puestos de Champions deben ser una prioridad.
— Sí, ha pasado en pocas fechas, cambios de entrenador y eso también como que fue un poco ruidoso, pero rápidamente se pasó la página. Hay que confiar en el nuevo entrenador que ha llegado. El Leverkusen como marca, tiene que estar ahí arriba y pelear puestos de Champions. El club lo demanda así. Los jugadores que hay creo que están a la altura. Podemos hacerlo para pelear puestos importantes arriba.
— Te tocó una etapa de transición importante, ya tenés varios años en el club, ¿cómo ha sido todo este proceso a lo largo de tu trayecto en Leverkusen?
— Ya van cinco años desde que estoy acá. La verdad que ha pasado muy rápido. Si bien cuando llegué no tuve ese rodaje que yo quería tener, porque en River venía de ser importante y llegar acá. Después, me tocó tener una lesión y volver. Pero creo que estos últimos años me he sentido más importante. He renovado con el club y también eso me ha dado también la importancia del club, que confían en mí hasta el día de hoy. Mi cabeza está puesta acá. Ahora mi foco está en hacer la recuperación lo mejor posible, volver fuerte y estar preparado porque de acá a unos meses se vienen muchas cosas importantes.
— Me gustaría saber qué sello dejó Xabi Alonso en Leverkusen y qué me puedes comentar de la aportación que dan Lucas Vázquez, Alejandro Grimaldo y Aleix García.
— Xabi ha dejado una huella muy importante acá en el club porque ha sido el técnico campeón en Leverkusen. En mi caso, he tenido una buena relación, porque desde que llegó confió en mí y me dio esa importancia que yo necesitaba de jugar todos los minutos, los partidos. Después, tanto Lucas como Alejandro, está Aleix, jugadores con mucha jerarquía, que son ganadores y se ve reflejado. Cuando juegan tienen ese potencial que ayuda al equipo.
— ¿Cuál dirías que es el sello característico de este club?
— Es un club que de a poco está acostumbrando a la gente a ser protagonista, porque lo que logramos el año pasado, hace dos años, fue algo histórico. De jugar bien, de ser protagonistas, de ir a todas las canchas a ganar. Creo que esa marca la hemos ganado con respeto y creo que para los rivales también el Leverkusen se ha ganado ese respeto a nivel internacional.
— ¿Qué tan difícil puede ser el fútbol alemán para el jugador latino?
— Creo que el latino o sudamericano tiene algo diferente que es la jerarquía, que lo hace diferente. Si bien la liga alemana es muy física, muy dinámica, creo que los jugadores sudamericanos, argentinos, brasileños, los colombianos, todos se adaptan de la mejor manera.
— ¿Qué opinión tenés de Luis Díaz, que lo has enfrentado en eliminatorias y ahora en el Bayern le está yendo bien?
— Es un gran jugador. Yo creo que está en ese ranking de los mejores jugadores del mundo hoy en día, con la calidad, con la velocidad que tiene. Lo viene demostrando cada fin de semana. En su club lo está haciendo de la mejor manera, en la Selección también. Lo hemos enfrentado en la Selección, así que la verdad que es un jugador admirable, respetable.