
El Gran Premio de Qatar de la Fórmula 1 fue escenario de un singular encuentro entre arte y deporte. En el hospitality VIP de la escudería Alpine, el artista Gaston Liberto le entregó a Franco Colapinto un retrato titulado “Lusail”. “Esta obra es un homenaje al joven deportista que hoy inspira y representa a nuestro país en todo el mundo”, expresó el muralista, que suele inspirarse en el deporte y es autor de una serie de obras icónicas dedicadas a Diego Maradona.
La entrega fue gestionada por la Embajada Argentina. El retrato muestra las banderas de Qatar y Argentina como fondo y tiene en primer plano al corredor, de 22 años, y simboliza la unión cultural y deportiva entre ambas naciones.
“Fue una aventura de dos días. Es casi imposible entrar donde estuvimos, éramos 15 personas nada más ahí. Ahí, Franco nos dedicó unos minutos a cada uno. Cuando vio el retrato, con esas expresiones espontáneas que tiene, dijo: ‘¡Guau, qué bueno! Me encantó’. Le expliqué que era especial para Lusail, porque tiene las banderas de los dos países. Le di un abrazo, lo felicité. Fue una ardua gestión. Un encuentro súper emotivo», le contó Liberto a Infobae tras haber presenciado la actuación de su compatriota, que terminó 20º en la Sprint y 14º en la prueba principal.
“Nunca había ido a la Fórmula 1. Fue una aventura de dos días para entrar. A la obra la iba a exponer en la feria de arte en Doha a la que viajé, pero cuando me enteré que podía acercárselo a Franco, se lo propuse al Consulado y les pareció genial”, explicó la génesis del obsequio.
Para llegar al corredor bonaerense, que continuará en Alpine durante 2026, contó con dos cómplices. Uno de ellos, coterráneo: Cristian Tejera, oriundo de Río Cuarto, como el artista, y mecánico de Colapinto en sus inicios. “Lo hablé con el padre, con Aníbal, y con Cristian Tejera, y me pudieron ayudar”, describió.
Liberto le puso su sello a una serie de murales de Diego Maradona en distintos lugares icónicos en su vida -la saga se titula “El Camino de Dios”- y las últimas dos escalas fueron en Nápoles y Río Grande. Ahora llegó el momento de pasar por el mundo árabe, donde Pelusa dirigió al Fujairah FC y al Al-Wasl.

También fue el encargado de inmortalizar a otro coterráneo, Pablo Aimar, en su Río Cuarto natal, luego de la conquista en el Mundial 2022. Lionel Messi es otra celebridad del deporte que tuvo su clon gracias a su paleta de colores a lo largo de casi 25 años de experiencia (12 los vivió en Barcelona, la casa de la Pulga). Esta vez le tocó llegar con su pincel hasta Colapinto. Aunque la misión se convirtió en una aventura frenética de 48 horas.




